domingo, 28 de febrero de 2010

quiero

¡Es que no me entiendes!
Es a tì a quien quiero...

...o una parecida.

domingo, 14 de febrero de 2010

Tenemos que hablar

"Tenemos que hablar", me dijo. Yo realmente no tengo nada que hablar. No hay para què hablar con quien no escucha y èl nunca escucha, nunca cambia, nunca endereza. Pero no, nunca se arrepiente, nunca recuerda, nunca se calla. Todo es pequeño, al menos claro que el afectado sea èl. Èl siempre el bueno y yo siempre el malo.

Me recuerda bastante a la "Santa Iglesia Catòlica" en la que nacemos malos y debemos acudir a ella que es "pura" para salvarnos. Porque recuerden que esa sì es pura, ya que fue Dios quien la fundò y luego confeccionò los planos, subcontratò algunas empresas (por concurso, porque es lo justo) , diò el primer picazo y luego bajò de nuevo para la fiesta de inaguraciòn de la primera iglesia. Fue tremendo bonche, habìa mucho de todo lo que usted quisiera (¡o sea!, Dios era el anfitriòn), la prensa y los invitados quedaron encantados. La sorpresa de la noche fue cuando se anunciò que todos los presentes iban a ir al cielo.

Pero sì, nacemos pecadores ("malos") y debemos ir a la iglesia ("santa") para salvarnos. Es como lavarse las manos con lodo. Asì es con èl. Yo soy el malo por no... ¿por no què?, ¿què es lo que he hecho mal? Ah sì, no hacerle nada de caso, haberle perdido el cariño y el respeto. He hecho mal en saturarme. Se me llenò el tanque. No seguirlo por el laberinto que construye en cada momento. Siempre hay paredes nuevas y las paredes viejas te persiguen, nunca quedan atràs. Hasta lo màs simple es complicado y no ha pasado nada. Para èl no ha pasado nada. Para mì ha pasado todo lo que iba a pasar. Demasiados años en esto.

Estoy harto.
Te cuidas.

lunes, 8 de febrero de 2010

10 cosas màs que me molestan

Muchas cosas me molestan, reconozco que soy un poco intolerante. No creo que valga la pena comentarlas, pero hay algunas que se destacan, me molestan tanto o tan fàcilmente que son casi meritorias. El conteo se extiende, el listado anterior aùn me sigue molestando y estas no se quedan atràs.

1-...O lo hago a mi manera o lo haces tù. Que increìblemente molesto es cuando una persona (por lo regular femenina) te pide o exige que hagas algo y tù eliges la forma que consideras òptima, la forma que mejor te acomoda o que màs te conviene. De repente, esa persona interviene y te sugiere a manera de òrden que no lo hagas de esa manera. Sugiere, sugiere y sugiere, pero no, no lo hace y ante el amable ofrecimiento de que lo haga usualmente surgen respuestas como: "nooo, hazlo como tu consideres", "hazlo como tu creas mejor", "hazlo como te convenga" o "eso es para tì, hazlo como tu quieras". Debo resaltar que es especialmente irritante cuando es algo para tì, sì, para tì y tù, si tù, lo estàs haciendo como lo quieres, como te conviene o con el grado de esfuerzo necesario para satisfacer tus necesidades. Si es para mì, dèjame hacerlo como me de la gana, total, es para mì.

Considero necesario mencionar el caso del sancocho. Un dìa luego de clases, con mucha, mucha hambre, lleguè a mi casa y me enterè, viene buena noticia, que habìa sancocho del dìa anterior en el refrigerador. Mi rostrò se iluminò con la idea y la decisiòn fue fàcil, no habìa mucho que pensar. "Bàrbaro, sancocho, estoy hecho." Pregunto por la ubicaciòn de mi futura comida (si, pregunto, quizàs ese fue mi error, pero sì, tenìa que preguntar, es que desde que nos mudamos todo està duplicado y sucede que tenemos dos estufas, dos microondas, etc., un sofà mirando hacia una pared por falta de espacio y, sì, dos neveras.) a lo que genialmente me responden: "sancocho està ahì, en la nevera". Luego de una gran bùsqueda abriendo y destapando, lo encuentro. Cuando estoy a punto de servir en un plato para llevarlo al microondas (al que està conectado, el otro lo usamos para guardar tupperwaer limpio), me detienen con ànimo de sentencia y descalificando toda mi experiencia en el uso de esa gran invenciòn, ¡oh gran microondas!, me dicen: "¡No pongas eso en el microondas que no se calienta! ¡Busca una olla!"

Inocentemente y malhumorado, procedo a buscar la olla. No conforme con la orden anterior, continuan las sugerencias hasta que decide darme un golpe de Estado y derrocarme, de manera violenta terminò con mi breve gobierno, ya no era yo quien dirigìa los rumbos de mi comida. Conciente del hambre que me afectaba, la insensible dèspota procediò con su macabro plan. Pasò de ser yo calentando mi sancocho, a ella calentando todo el sancocho, aùn cuando yo era el ùnico que querìa, disque "por si alguien màs quiere". El tiempo pasa y mi dèficit energètico aumenta, las alarmas biològicas y los niveles de estrès se dejan senitr cada vez màs. Ese instinto animal de supervivencia aflora, de repente, mis sentidos se agudizan, el campo visual se reduce pero se intensifica, los sonidos ambientales se amplifican y se descartan en bùsqueda de un error de mi presa y el olfato, hipersensible, en bùsqueda de su presencia. Entonces, alcanzo el punto màximo de desesperaciòn, y de mal humor, me decido a comèrmelo frìo o como estè o a ser menos salvaje y tomar mi parte de la olla y ponerlo en el microondas. Al percatarse de mis intenciones, frìamente y con cara de "¿tù crees que sabes màs que yo?", me dice: "Eso hay que esperar que hierva, yo le echè agua de la llave (muajaja)".

"¡C%&o, pero esta v%$!@a es increìble! Yo querìa calentar mi m%$·&)o sancocho, igualito que como lo hago todos los dìas, pero no... ¡nooooooo! ¡porque eso asì no se calienta! Ademàs, ¿què diablo importa si no se calienta? ¿no soy yo que me lo voy a comer? ¡Dèjeme comèrmelo como yo quiera!" Ya harto (pero no por haber comido), harto de esperar. Màs de 45 minutos habìan pasado desde aquel momento habìa empezado a soñar con sancocho. Ya mi sueño se habìa convertido en pesadilla y dàndome por rendido exclamè: "yo voy a comer yuca!"(que estaba hecha ya). "Mira muchacho, no seas malcriado, espera que hierva el sancocho que ya lo puse a calentar para tì, que tu eres el ùnico que quiere."

O sea, ¡la crueldad no tiene lìmites! espera el sancocho! espera màs el sancocho, sancocho que iba a comer en cinco minutos, sancocho del que yo eficientemente iba a calentar el mìo, pero que un ataque de prudencia y paranoia llevò a calentar toda la olla. Encima de todo, yo soy malcriado, si yo, meritoria ella que por propia voluntad y en contra de la mìa, accediò a una peticiòn que yo nunca hice y me salvò del increible mal que iba a significar comer. Si, lo que pasa es que ella dentro de sì sabìa que yo querìa protestar mediante huelga de hambre... Y claro que comì yuca. Pena que entonces nadie querìa sancocho y una vez caliente, tuvo que esperar que se enfriara y entrarlo de nuevo a la nevera.

De donde se desprende la segunda cosa que me molesta:

2- Cuando quieres hacer algo para tì, de la forma que te gusta, como sabes que te gusta y funciona y alguien interrumpe. Esto incluye pero no se limita a cuando vas conduciendo y alguien "te ayuda", cuando te estàs parqueando y alguien "te ayuda" y cuando estàs haciendo algo que has hecho un millòn de veces y alguien te lo està explicando como si no lo hubieses hecho nunca y el fuese un experto (lo peor es que algunas veces no puedes decirle "càllate que yo sè" o "idiota, càllate, yo sè lo que hago"). Ademàs, cuando quieres hacer algo para tì de la forma que te gusta y alguien te ayuda a hacerlo de la forma que no te gusta "porque asì es mejor".

3- Los parqueadores. Sì, esos señores, dueños de las calles que primero "te ayudan" a parquearte y luego te amenzan con cuidar el vehìculo, dicièndo una frase tipo: "jefe, estamos aquì" o "ya usted sabe, yo se lo cuido". Siempre son hombres perfectamente aptos para desempeñar cualquier trabajo real, cualquier trabajo ùtil y si usted no quiere hacer algo asì, muèrase de hambre. Tanto dinero que se paga de impuestos, tanta placa y tan caro que sale mantener un vehìculo, para que cuando quieres beneficiarte de uno de los pocos beneficios que tiene esta ciudad (parqueos gratis), venga un pendejo a cobrarte por usar su pedazo de la calle. Algunos son tan atrevidos que vienen encima de tì con un ticket, o sea, ¡es un robo institucionalizado! ¿què se creen ellos, polìticos?

4- La gente que limpia vidrios en las esquinas. De nuevo, hombres jòvenes, aparentemente en buen estado fìsico y pidiendo. Tantas construcciones y tantos obreros que se necesitan y estos tipos pidiendo. Pero no sòlamente pidiendo. Alterando el estado de calma y paz que promueven los semàforos, un momento para detenerse, pensar, reflexionar escojer un rumbo para tu vida. Pero ademàs, violando los sagrados derechos al espacio personal (extendido) y la propiedad privada. ¿Què diablos le da derecho a ponerle la mano a mi vehìculo? ¡En serio, eso es lo mismo que si alguien viene y ta agarra una nalga! ¡Manosear tu carro es como manosearte a tì, como estrujar la ropa que llevas, agarrarla y moverla y luego entonces, pedirte dinero!¡Què parte de trabajar usted no entiende! ¡Y no piden, exigen un pago por un servicio que independientemente de la calidad, c%&o, no fue solicitado! Ah y la calidad... la calidad de ese servicio. Esa agua y la parte del carro donde ese muchacho apoya la mano, si va y tu carro es blanco... y cuando recoje el agua, ese chorrazo de agua que se desliza por los laterales. No quiero ni mencionar el sentimiento que en mì inspiran cuando el vehìculo està acabado de lavar... buenos vagos.

5- Me molesta enero, declarado por mì como el mes mundial de las dietas y el ejercicio. De repente, todo el mundo es el màs dedicado. Todo el mundo va a... Todo el mundo se puso en eso y està entregado. Entrega y dedicaciòn que van a durar pocas semanas, casi un insulto para el que de verdad està en eso. Los gymnasios llenos y el ùnico tema de conversaciòn. Y como sea, es todo palabrerìo, se habla màs de lo que se hace y se supone que en esto, deben ser los resultados los que hablen.

6- Tambièn, cuando la gente pretende que hagas la parte que les toca a ellos. Seguro que si dieras a elegir, la mayor parte de la gente preferirìa que alguien màs hiciera por ellos lo que les toca hacer. Yo no, yo quiero hacer lo que me toca y algo màs. Yo quiero trabajar y disfrutar de mi trabajo, pensar, sudar, cojer lucha y aguantar dolor si es necesario. Asì hay muchos y a esos quiero en mi equipo.

7- Los canales de mùsica actuales. Cuando yo era pequeño, en los canales de mùsica se ponìa, sì, sorpresa, ¡mùsica! Ahora, hay reality shows y... reality shows. Ademàs pasan unos comerciales de intèrpretes prefabricados que tienen diferentes nombres, nacionalidades o sexos, pero soprendentemente son todos iguales y nadie parece notarlo.

8- El sistema actual. Uno deberìa poder acercarse, expresar sinceramente la impresiòn que ha casuado la apariencia de la muchacha y como esto ha desencadenado una serie de procesos que te hacen estar interesado en ella. La muchacha, deberìa ser tambièn sincera, expresar el grado de interès hacia uno y hacia la posibilidad de conocerse mejor. Pero no, lamentablemente no es asì como funciona.

(Aclaraciòn: tambièn podrìa ser el mètodo del garrote, la ves, te gusta, un golpe en la cabeza y te la llevas arrastrando por el cabello. (jajaja!))

9- Cuando una persona cree que està en algo y realmente no està nada. Estoy incluye, pero no se limita a:

-Cuando alguien ha bajado de peso y aùn te falta, pero no estàs conciente de cuanto te falta.
-Cuando alguien cree que recibe un trato especial y realmente no ocurre asì.
-Los erotomanìacos.
-Todo el que cree que sabe mucho y lo unico que tiene mucho es fe en que sabe.
-La gente que cree que Arjona es poesìa, Coehlo es literatura o Kenny G es jazz.
-La comida de dieta y sus consumidores. Si es bueno no tiene que ser de dieta. Nadie nunca ha visto una manzana light. La falsa creencia de que el pan integral es "pan de dieta", que la carne engorda y que lo mejor es tomar jugo.
-La gente que espera resultados sin trabajo, por alguna extraña razòn, el trabajo duro no està de moda.

10-Cuando la gente pretende hacerse la vìcitma, intenta manipular o causar pena. Que pena manito, que pena, yo no entro en esa. Usted hace lo que hace porque quiere e hizo lo que hizo porque quiso. Eso de buscar culpables, descargarse de la responsabilidad que le corresponde y peor aùn querer aparentar vìctima es de las peores cosas que alguien quiere hacer. Es tan incorrecto, tan perverso, es mentir y aprovecharse, engañar, premeditar y luego ocultar. Crèanme cuando hay vìctimas, estas son evidentes. Cuando una persona es vìctima no tiene la necesidad de destacarlo, se ve, se siente, queda claro, se nota y por lo regular, todo el que està cerca se da cuenta.

Siento cierta ira dentro, cierta carga, cierta rabia. Al menos me sirve de impulso, tendrè energìa de sobra una vez que la procese. ¿Por què lo hacen? En serio, ¿para què? Quizàs me molestan tanto porque no lo entiendo, aunque en realidad si lo entiendo, los entiendo a todos y es por eso que me molesta.