Hay cosas tan obvias que no pueden ser vistas, no mientras nos esforcemos en comprenderlo todo. Todo tiene un sentido y una dirección y es mas fácil saber cuales son desde afuera y es por eso que ayuda bastante ver las cosas desde diferentes perspectivas, todas las posibles.
La vida es tan explícita que, para facilitar su asimilación, disolvemos las situaciones e intentamos vivir falsas realidades, buscamos tesoros en cofres vacíos e intentamos llenarnos de cosas vanas.
Se nos enseña a creer a manera de obligación en verdades dudosas sostenidas en evidencias subjetivas, se reprime la curiosidad y se castiga el espíritu crítico. Pero se sabe o no se sabe, el que cree duda y el que duda simplemente no sabe.
La belleza real y pura es tan humilde que no exige ser admirada, conoce su valor y es consciente de que no todos tienen la capacidad de apreciarla. Es elitista, no se lamenta por aquellos que la confunden con otras cosas y le basta con existir para estar completa. Se presenta de diferentes maneras y en diferentes grados de complejidad, por lo regular es simple o al menos intenta serlo, pero la simplicidad es subjetiva.
El egoismo es necesario y saludable, olviden los prejuicios y no saquen conclusiones apresuradas, pero por alguna razón que desconozco se presenta como perverso, se empaña y se quiere hacer sinónimo de la avaricia, la vanidad, el egocentrismo e incluso de la estupidez. Una persona que lo quiere todo para si, no es egoista, es avara. Una persona que busca ser el centro de atención usando algun bien o atributo que posee, no es egoista, es vanidosa. Ego = yo. ?Que puede ser más positivo que buscar lo mejor para si mismo? pero buscar lo *mejor* para sí perjudicando a los demas es un absurdo, y es una acción característica de una persona claramente confundida, que ignora que todo es un solo conjunto y que un dañoo a un elemento del conjunto perjudica a todo el conjunto.
Toda causa produce al menos un efecto y es la consecuencia de otra causa. Nada se crea y nada ni se destruye, más, todo se transforma. Todo es simple, en esencia. Hay posibilidades que no podemos descartar. Todo lo imaginable es posible y muchas cosas posibles son inimaginables. La complejidad de la vida consiste en no tener la suficiente imaginación como para ver que tan simples son las cosas.
viernes, 15 de febrero de 2008
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